jueves, 18 de noviembre de 2010

Los curiosos "valores" de Cynthia Hotton


El marido de la diputada opositora al matrimonio igualitario dirige una cadena de hoteles “gay friendly”
Como ya todos y todas sabemos, desde el 15 de julio de 2010 el matrimonio entre personas de un mismo sexo es ley en la Argentina gracias a la aprobación de la ley 26.618.

Durante los meses en que el proyecto de ley transitó por el Congreso Nacional, pero más específicamente en la Cámara de Diputados, fue la diputada Cynthia Hotton la principal figura que se opuso a este derecho la cara más visible y mediática de una lucha sin cuartel que pretendía seguir discriminando a las personas por su orientación sexual.

La ex legisladora del Pro y diputada nacional evangçelica del partido politico-religioso ultraconservador “Valores para mi Pais”, agrupó en su nefasta militancia a distintas organizaciones reaccionarias y religiosas bajo el lema “Queremos papá y mamá”, participó en la mayoría de los debates en los medios, recorrió el país junto a la senadora miembro del Opus Dei, Negre de Alonso, organizando las “marchas naranja”, juntó mas de 500.000 firmas (según publicó en su blog) e intentó convocar a un plebiscito aprovechando el alto rechazo que el proyecto de ley generaba en el interior del país, donde la Iglesia Católica gobierna implícitamente.

Hija del diplomático Arturo Hotton-Risler es licenciada en Economía, diplomática y está casada con el empresario Julio Ducdoc. Este sería un dato menor de no ser porque, su también cristiano marido, es empresario y director de Rochester Hotels, una cadena que publicita en su blog corporativo a uno de sus hoteles como gay friendly, precisamente el de Bariloche.

Días atrás, a través de la red social Twitter los periodistas Soledad Vallejos y Matias Kirschenbaum habían comenzado a hacer circular esa data. Finalmente, el encargado de recolectar esta información fue Pablo Kierez, un estudiante de Ingeniería y Telecomunicaciones que aprovechó su blog para difundir su hallazgo. El autor, como muchos y muchas más seguramente, se pregunta:

¿Donde quedan esos fervientes valores cristianos a la hora de los negocios? Condenan la homosexualidad: ¡es inmoral, pecado, aberración, antinatural, destrucción del plan de Dios! pero el hotel de su marido en Bariloche se describe como “donde vos y tu compañero pueden disfrutar y relajarse, ¡no te vas a arrepentir!”

¿Acaso no es pecado lucrar con ello? ¡Como saberlo! las escrituras religiosas son demasiado confusas e interpretables a conveniencia según la ocasión… Te discriminamos, te estigmatizamos, negamos tus derechos, te consideramos inferior y hacemos política con ello! Pero amamos que seas nuestro huésped y nos dejes tu “dinero gay” el del famoso “double income, no children”.

¿De qué valores hablará Hotton? de los respetables, sagrados, intocables, ¡incuestionables! valores cristianos o de los valores económicos obtenidos por su marido?

Honorable cámara de ridículos



Entre los ridículos de siempre, apareció ella, con voz suave, hablando de valores, indispensables a la hora de alcanzar la aprobación de cierto público, y en un tono de niña bien, Cinthya Hotton.

En una terrible actuación, símil a un acto de la escuela primaria, la diputada del monobloque valores para mi país, pide la palabra justo cuando tenía la palabra el diputado moran (coalición cívica) Este, obviamente accedió a la interrupción, luego de hacer ademanes de todo tipo, junto a su colega Adrian Pérez para que Cinthya lo interrumpiera.

Por lo visto, la diputada del monobloque, estaba dubitativa, y ante esto, la traidora Patricia Bullrich se levanto de su banca, dirigiéndose a la de Hotton, para darle un empujoncito.

La misma declaro ante el congreso, que fue Patricia Fadel, (kirchnerista), quien la llamo por teléfono, para ofrecerle “lo que quieras” por votar a favor de la ley de presupuestos.

También declaro lo supuestamente sucedido ante la justicia; abra que ver si aquí denuncio lo mismo que en el congreso o se abra pisado como lo vimos en los distintos medios de comunicación.

Hotton, al final, ¿te llamo o la llamaste?, y ¿hubo o no un monto?

Pero este no fue el único personaje, también la encontramos en esta mala interpretación teatral, a Elsa Álvarez.

Para quienes pensaron y esta de donde salió, aclaramos, diputada por el bloque radical, santa cruz.

Elsa Álvarez, un hermoso mamarracho, corte salvaje (salvaje el peluquero que la agarro), pinta de loca histérica, va… radical.

Denuncio un supuesto llamado con la finalidad de comprar su voto o invitarla a retirarse del recinto; cosa que al igual que la diputada representante de valores para mi país, desmitifico en los medios de comunicación.

Y como si faltara poco en este ridículo escenario, como broche de oro, el compañero kunkel cobro!!

Y quien fue la autora de este hecho, la diputada Graciela Camaño (pj federal), pero no le pego solo un cachetazo, fueron dos.

La misma, justifico su acto, argumentando estar harta de que Carlos la acuse de ser la señora de alguien.

Camaño se había acercado a Kunkel, con quien mantenía una acalorada discusión. Pero reaccionó luego de que Kunkel gritara: "Yo nunca prometí falsamente que dos años no iba a robar y después seguía robando". El diputado se refería a la histórica frase de su esposo, el dirigente gastronómico Luis Barrionuevo, que había dicho que para que el país saliera adelante "había que dejar de robar dos años".

En ese instante, la ex ministra de Trabajo de Eduardo Duhalde golpeó a Kunkel ante la mirada de todos los legisladores y se retiró de la sala.

Esta más que claro que y quienes son nuestros rivales, y está más que claro que no tenemos nada de que temer.

Como dijo el general, "En la república tenemos algunos opositores. Con procedimientos honrados debemos ir persuadiéndolos d que están equivocados, ya q piensan y sienten hace años como nosotros. Han dicho muchas veces q es necesario hacer lo q nosotros hacemos, y hoy están en la oposición. Ellos se explican porque andan detrás de posiciones personales y no defienden un movimiento nacional. EL EGOÌSMO NO ES BUEN CONSEJERO"

Alejandra Orlandi